No es ningún secreto el tiempo que llevo buscando en casi
todas las tiendas de libros un libro que por mediación de un tercero que hace
tiempo que me leí, le hacia muchas referencias, el libro en cuestión es Dios,
Patria y Coca-cola, descubrí que este libro estaba descatalogado desde el 2001
hace ya casi 10 años y que la única manera de poderlo encontrar era en ferias
del libro de segunda mano y de ocasión, la cual cosa fue bastante imposible
porque ni así, tenía la suerte de encontrarlo.
Hace poco fui a Madrid con Ángel a visitar la ciudad, y de
paso probar el famoso AVE, (que ya hablaré de él en futuros post), ya que nunca
he estado en la capital de país, una vez allí por mediación de unos familiares
de mi amigo Ángel encontró el libro en la web de una tienda de Madrid por 35 €,
aunque me parecía un poco caro decidimos ir a por el, una vez allí en la misma
tienda nos dijeron que al ser un libro descatalogado y de segunda mano teníamos
que pedirlo mediante la web (cosa que me dejaba bastante flipado ya que estaba
allí mismo en Madrid y quería que volviera a Valencia pedir el libro y ya me lo
enviarían), total que cuando vuelvo a Valencia decido buscar en otras web´s de
tiendas de libros de segunda mano y encuentro el libro por el fabuloso precio
de 3,5 €, así que decido hacer el pedido más los gastos de envío tan solo se
queda en 10 € muy por debajo del otro precio que encontré, relleno los datos y
lo pido, me envían un correo que el número de pedido y a esperar….
Así que a los dos días recibo un mensaje el libro ya debe
estar en mi poder o apunto de llegar pasan dos días más y nada, así que decido
llamar para ver que pasa, la tienda me dice que el libro ha sido enviado que ya
lo debería de tener y me da el teléfono de la agencia de transporte que la
central está en Madrid, llamo y me dicen que el paquete está en valencia pero
parece ser que los datos no los han puesto bien y por eso no me llega pido que
por favor me den el teléfono de la delegación de Valencia para poder ponerme en
contacto con ellos, y quedo para ir a la central a recogerlo por la tarde, para
mi sorpresa descubro que la chica del teléfono se le ha olvidado comunicar al
transportista que el paquete lo dejara en la central y lo lleva consigo, (esto
ya es el colmo de la incompetencia española), en fin, decidimos que llame al
transportista para ver donde está así depende de la distancia me espero o no,
resulta que el transportista esta a dos pueblos de la central y decido que se
espere una gasolinera que había en la localidad hasta que yo llegue, no quería
tener que esperarme hasta el lunes, una vez allí como si de dos traficante de
droga se tratasen, me identifique sacó el paquete y cada cual subió a su vehículo
siguiendo su ruta sin mirar atrás. Esta ha sido la odisea que tuve que hacer
para poder conseguir el puñetero libro, ahora solo me queda poder disfrutarlo leyéndolo,
os dejo una muestra de mi alegría al abrir el paquete ya en casa.
¿Y vosotros, que habéis estado dispuesto hacer por algo que queríais muchísimo?
A lo mejor por eso Pepe Blanco fue a la gasolinera: había comprado un libro.
ResponderEliminarEn serio. Yo compro de cinco a diez libros al mes, todos descatalogados porque lo mío es la bibliofilia. Lo que te ha pasado es una anecdotilla al lado de lo que te podría haber ocurrido, créeme.
Vaya, yo la verdad no soy mucho de comprar libros y menos descatalogados, suelo moverme más por temáticas, que a veces como en este caso ha terminado en un libro descatalogado. Gracias por comentar.
ResponderEliminarQue odisea mushasho!!!, es casi igual a la vez que pedi un móvil y me lo trajeron en una semana larga según los operadores (al final fueron dos meses y la casi destrucción de mi paciencia). Como siempre un placer leer tu blog, Un saludo!
ResponderEliminarBah, pero que poca paciencia tienes. Llevas ni se sabe el tiempo buscándolo y luego tienes que ir tras el transportista para conseguir tu "tesooooro". Que eres un ansias. :P En cualquier caso, supongo que habrá valido la pena. ;)
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