En mi viaje a Japón unos, de los sitios que más me fascinó y dispuse de muy poco tiempo para disfrutar fue la isla de Odaiba, fue construida en 1853 por el shogunato Tokugawa, y consistía en una serie de seis fortalezas destinadas a proteger Tokio de ataques vía marítima. En japonés, la palabra Daiba se refiere a las baterías de cañones colocadas en las fortalezas.
En 1928, la tercer daiba fue reformada como un parque, y abierta a la visita del público. El desarrollo moderno de Odaiba comenzó después del éxito de la Expo '85 que tuvo lugar en Tsukuba. La economía japonesa de la década de 1980 estaba avanzando a grandes pasos, y Odaiba fue entonces conceptualizado como una vitrina para mostrar un estilo futurista de vida. Con una inversión de diez mil millones de dólares, se desarrolló la isla habitacional, la cual fue abierta en 1993, y sufrió unos primeros años de estancamiento urbano, ya que la crisis japonesa de la década de 1990 no permitió su rápida colonización.
Odaiba se une a Tokio a través de varios puentes y túneles, incluyendo el puente colgante Rainbow Bridge. Sobre este último, corre el sistema de transporte automático Yurikamome que fué el que cogimos nosotros.
En 1996, Odaiba fue replaneada como un área comercial y de entretenimiento, lo cual revitalizó a la isla, y es de lo más me impactó de ella en el cual matizaremos donde encontré el centro comercial más retro que encontré en Japón llamada Decks Tokyo Beach.
Como podéis ver en las fotos, toda la planta esta destinada a lo retro desde los juegos hasta las máquinas que se usan, nada de emuladores.Tanto los clásicos Pachincos, como podéis ver en las fotos como la típica máquina de pinball completamente mecánica sin números digitales retro retro 100%.
Como he dicho antes, la decoración está muy cuidada incluso como podéis ver en la vitrinas que habían están las clásicas máquinas que aparecieron a finales de los 70´s principio de los 80´s, hasta las máquinas de bebidas son clásicas de época que dan las bebidas con botellas de vidrio como podéis ver con la coca-cola clásica y algo mucho más especial en japón, la conocida bebida llamada ramune.
Curiosamente la máquina funcionaba con monedas de 100 yens y con el calor que hacía se agradecía mucho que estuviera tan fresquita.
Como he dicho antes la famosa bebida Ramune tan famosa en Japón desde los años 50, la clásica de siempre sería un sabor como Sprite o 7up.
Aquí otro de los decorados del centro comercial cuidando mucho esa estética retro de los 50- 60 por éste parque para los niños de la época, digamos que es una forma de no perder la historia social de la época porque yo personalmente me sentí viviendo en esa época.
Si te ha gustado éste post el próximo voy hablar de otra época mucho más antigua, estoy hablando de la época Edo que encontramos en el parque temático situado en Nikko llamado el EDOWONDERLAND.